Poco a poco la primavera va llegando. Las terrazas de los bares van teniendo más vida, nuestros armarios dan paso a las chaquetitas y los pañuelos dejando a un lado las bufandas y gorros, las temperaturas comienzan a ser más agradables,… Sin embargo, no todo son ventajas. La llegada de la estación de las flores ha traído con ella una hora menos de sueño. Este cambio horario es notado sobre todo por las mujeres, ya que son más sensibles a los cambios.
Por ello, le damos seis consejos para que se adapte adecuadamente al cambio de hora sin ningún problema.
1. Para recuperar el tiempo de sueño perdido acuéstese una hora antes, es decir, acuéstese un poco antes para ir adaptando al cuerpo al nuevo horario poco a poco. Según recomienda el Instituto DKV de la Vida Saludable, lo mejor es prepararse cuatro o cinco días antes del cambio de hora modificando paulatinamente nuestro horario. De este modo, el cambio no será tan brusco.
2. Practicar ejercicio físico con regularidad ayuda al cuerpo y a la mente a relajarse y a adaptarse a los cambios. Los expertos recomiendan practicarlo por la mañana para afrontar el resto del día con energía. Nunca antes de dormir, ya que puede dificultar el sueño.
3. Decir adiós temporalmente a la siesta. El Instituto DKV recomienda olvidarse de la siesta durante unos días para que el organismo se adapte al nuevo ciclo de sueño.
4. Evitar los excitantes, como las bebidas con cafeína o el café, el té o el alcohol, en especial por la tarde, ya que pueden influir negativamente en la calidad del sueño y el sistema nervioso.
5. Cenar las cantidades justas. No hay que irse a la cama ni con el estómago vacío, ni con él demasiado lleno. Debemos facilitar la digestión a nuestro organismo para que termine antes de irnos a la cama. Para ello, los expertos aconsejan una cena ligera y a una hora temprana.
6. Poner en off los aparatos electrónicos. Antes de irnos a dormir tendemos a consultar el móvil, la tablet, el ordenador,… un hábito poco saludable. En este caso, el Instituto DKV asegura que el exceso de luz, que emiten las pantallas, puede causar alteraciones en el sueño, además de otros efectos secundarios en el organismo.
fuente msn.com