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La presencia de sargazo no sólo afecta los destinos turísticos de alta afluencia en México, sino también a pequeñas cooperativas de pescadores como Playa Vicente en Juchitán, Oaxaca.
Diariamente brotan unas seis toneladas de alga marina y todas las mañanas con palas y costales, los pescadores limpian el sargazo que cada día se acumula más en las orillas.
«Lo que no está en nuestras manos este problema que tenemos del sargazo nos ha rebasado, nosotros lo que podemos hacer humanamente es que con las herramientas que tenemos pues es limpiar la playa, pero acá hasta el momento no tenemos apoyo”, comentó Fernando Santos, agente municipal de Playa Vicente, Juchitán.
Al problema de contaminación natural por algas, se le suman las aguas negras, debido a que la ciudad de Juchitán no cuenta con plantas para tratar las aguas residuales que son vertidas a la Laguna Superior del Golfo de Tehuantepec.
«Esto se agrava con la contaminación del Río de Los Perros, donde atraviesa varios municipios de aquí de la región y prácticamente todos no tienen plantas de tratamiento, vierten sus aguas negras, es un problema que tienen todos los municipios”, agregó.
La descomposición de las algas mezcladas con las aguas negras genera malos olores y es el acabose para 350 pescadores que subsisten de los visitantes locales, que frecuentan sus 50 restaurantes de pescados y mariscos.
«Huele esa cosa, ya mejor nos vamos otro día ya cuando no haya esa cosa regresamos, ya por ese motivo casi no hay pescado”, dijo Manuel Martínez, pescador de Playa Vicente.
Playa Vicente se ubica a 10 kilómetros del municipio de Juchitán, en el Istmo de Tehuantepec, su población se dedica a la pesca y a la venta de mariscos.
fuente excelsior
