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Una comerciante agobiada por una cuantiosa deuda, decidió quitarse la vida al ingiriendo una sustancia tóxica que disolvió en agua y le arrebató la vida.
Los hechos se registraron en el interior de un domicilio ubicado sobre la Avenida Monte Albán en el número 620, en la Colonia Moctezuma de San Martín Mexicápam.
Ahí, Ana Lilia Pérez Rojas, de 47 años de edad, vivía agobiada por una deuda que arrastraba y no podía pagar, ya que la venta de ropa, negocio al que se dedicaba, no le daba las ganancias suficientes para solventarla.
Ayer, al sentirse sola, decidió suicidarse, por lo que vació una sustancia en polvo en un vaso con agua, el cual agitó y enseguida se lo bebió en presencia de su hija.
De inmediato, la menor de edad, al observar a su madre que comenzaba a sufrir los efectos de la sustancia tóxica, se paró y se dirigió a ella para preguntarle qué estaba haciendo.
La suicida ya no le pudo responder, solamente vio que empezaba a sacar abundante espuma por la boca y de inmediato salió en busca de su padre, quien había salido de su domicilio para realizar tequio en la colonia con los vecinos.
Cuando llegó su padre, éste solicitó auxilio a uno de sus vecinos y a bordo de un automóvil particular trasladaron a Ana Lilia Pérez Rojas al hospital particular “Santa Anita”, donde horas después perdió la vida.
A dicho nosocomio, más tarde se trasladó el agente del Ministerio Público adscrito a la Cruz Roja, quien apoyado por elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones y de personal de Ciencias Forenses, realizó las primeras diligencias en torno al caso.
El representante social ordenó el levantamiento y traslado del cuerpo al anfiteatro de esta ciudad, donde quedó depositado para la práctica de la autopsia de ley.
En tanto que peritos aseguraron que lo que originó la muerte de Ana Lilia Pérez Rojas, se debió a un paro cardio respiratorio por edema cerebral y congestión visceral generalizado por sustancia tóxica desconocida, que tendrá que determinar el laboratorio del Instituto de Servicios Periciales
