Su compañero estaba preso y ella criaba sola tres hijos y trataba de abrirse paso en el mundo del espectáculo, cuando un día un hombre acompañado por otros dos individuos la siguió en su auto y la violó.
Jenni Rivera dice que se resistió inicialmente, pero luego dejó que la violasen porque pensó que si no la matarían y sus hijos se quedarían solos.
El dramático relato aparece en la quinta página y fija el tono para «Inquebrantable: Mi historia, a mi manera», una autobiografía en la que la cantante repasa sus grandes éxitos y los numerosos tragos amargos que tuvo que superar.
Si hubiera comenzando por otro capítulo, hubiera sido igual de impresionante. Página tras página, la fallecida cantante mexico-estadounidense habla con gran franqueza de sus grandes adversidades y de cómo llegó a levantarse y hacerse respetar, a triunfar en grande en la música.
Publicada por la editorial Atria Books, una división de Simon & Schuster, Inc., «Inquebrantable: Mi historia, a mi manera» («Unbreakable: My Story, My Way», en inglés) es una oda a la esperanza narrada por una mujer que es sinónimo de lucha, tesón y triunfo.
«Quería que la gente supiera que una puede ser bella a su manera, que una puede ser fuerte, educarse, luchar por tener su propia carrera. Y que ser una madre soltera no es algo para avergonzarse», escribe Rivera. «Es un orgullo levantarse cada mañana, empujar a tus niños hacia adelante y vivir tu vida sólo por ellos. Quería que todo eso fuera reconocido y aceptado.
fuente msn noticias