TUXTEPEC, Oaxaca.- Pese a la serie de personas que afirman que las lágrimas de la Virgen de Dolores que se encuentra en la parroquia de San Antonino Obispo, en la comunidad de Cerro Armadillo Grande, Valle Nacional, son reales, la Diócesis de Tuxtepec, a través del Obispo José Alberto González Juárez, aseguró que no se trata de ningún milagro.
Al término de la misa que se ofreció este domingo a las 10 de la mañana en la Catedral de Tuxtepec, el Obispo aclaró ante los presentes, la situación que se vive en Cerro Armadillo, por lo que descartó que se trate de un milagro como muchos lo llamaron.
«Yo quisiera aclarar, primero que invocar a la Virgen en cualquiera de sus advocaciones, demostrarle nuestro cariño y admiración, visitar sus templos es algo bueno, no tiene nada de malo».
El Obispo aseveró que se trata de un rumor sin fundamento real. Luego de haber investigado con el párroco Miguel Ángel Ruiz y fieles de la comunidad, se concluyó que en efecto, la Virgen tiene lágrimas en el rostro, mismas que son artificiales, hechas a propósito por quienes la fabricaron y vendieron así, con el fin de que dé la impresión que realmente está llorando. «La imagen ha estado así, desde que la compraron para la iglesia de la comunidad».
«Lo que estoy tratando de decir no es con el afán de juzgar o condenar a quienes hayan difundido ese asunto como un hecho real sin indagar y medir las consecuencias de su afirmación irresponsable», expresó el Monseñor.
De igual forma, invitó a las personas para que asistan a la parroquia y comprueben con sus propios ojos que se trata de un acabado que tiene la Virgen. «Si quieren ir, vayan para que lo comprueben; lo que sí le pido a las personas es que digan la verdad, no hay que decir mentiras».
Enfatizó que las imágenes sagradas utilizadas para el culto, tienen como objetivo elevar la atención, pensamientos y sentimientos a Cristo, a la Virgen y los santos. No obstante, dijo que esto no debe dar pie a difundir las percepciones propias.
fuente REDACCION